Se acaba un año y comienza otro, donde se suele hacer repaso de lo que dejamos y de lo que deberíamos dejar en el pasado, de lo que hemos y desearíamos haber conseguido de este periodo que agoniza y donde se proyecta el nuevo ciclo.
En definitiva, un punto perfecto para simplificar, aclarar y aunar lo que deseamos y lo que realmente queremos que el futuro nos depare. Al partir el año, tenemos ese rincón de tiempo y ambiente exquisito para sumergirnos en nuestra más íntima parcela de pensamiento y poder así, con toda la libertad, moldear lo que este nuevo intervalo nos haya de dar.
Mi deseo para ti, en cierta forma ya se va cumpliendo. Puesto que lo que te deseo es ganas de mejorar y luchar por ello. Con ello no digo que simplemente leyendo este blog vayas a hacerlo, pero sí que el interés vital que demuestras simplemente por hacerlo es en sí, creo, el mejor camino para ser razonable y pasionalmente feliz.
Obviamente no solo me refiero a proyectos económicos que ineludiblemente forman parte importante en nuestras vidas y, sentido de este blog, sino que me refiero todos los aspectos fundamentales en nuestras existencias.
Ilusionarse y luchar por presentarnos nuevas ideas y proyectos a nosotros mismos. Sean amorosos, sanitarios o económicos. Cuidar de los detalles, obviando cualquier éxito y fracaso del pasado en aras de aprender a mejorar es lo que al final vale. Puesto que son precisamente nuestras ilusiones y pensamientos lo más sólido que tenemos. Al final, nuestra “realidad” siempre cambia queramos o no, circunstancias, edad o cualquiera nos la puede trastocar. Pero nuestros pensamientos y deseos entrañables son tan solo nuestros y nosotros somos los únicos que decidimos a quien le damos acceso y solo nosotros los podemos modificar.
Creo que tal día como hoy es buena idea trasladar al papel u otro formato una lista, mejor secreta. Con el objetivo sencillo de que cuando finalice el 2008 tengamos elementos para hacer un balance donde encontrar nuestras contradicciones y virtudes. Los objetivos que con satisfacción veremos cumplidos, los que se cumplirán por un camino que ahora mismo seguramente ni nos imaginamos y los que quedarán pendientes o para reorientar para el siguiente.
Trataré de estar aquí cuando el año acabe, refiriéndome a esta entrada. Espero también que entre estas líneas vuelva a estar en tu órbita, genial si es en tu ecosistema.
Feliz año.
En definitiva, un punto perfecto para simplificar, aclarar y aunar lo que deseamos y lo que realmente queremos que el futuro nos depare. Al partir el año, tenemos ese rincón de tiempo y ambiente exquisito para sumergirnos en nuestra más íntima parcela de pensamiento y poder así, con toda la libertad, moldear lo que este nuevo intervalo nos haya de dar.
Mi deseo para ti, en cierta forma ya se va cumpliendo. Puesto que lo que te deseo es ganas de mejorar y luchar por ello. Con ello no digo que simplemente leyendo este blog vayas a hacerlo, pero sí que el interés vital que demuestras simplemente por hacerlo es en sí, creo, el mejor camino para ser razonable y pasionalmente feliz.
Obviamente no solo me refiero a proyectos económicos que ineludiblemente forman parte importante en nuestras vidas y, sentido de este blog, sino que me refiero todos los aspectos fundamentales en nuestras existencias.
Ilusionarse y luchar por presentarnos nuevas ideas y proyectos a nosotros mismos. Sean amorosos, sanitarios o económicos. Cuidar de los detalles, obviando cualquier éxito y fracaso del pasado en aras de aprender a mejorar es lo que al final vale. Puesto que son precisamente nuestras ilusiones y pensamientos lo más sólido que tenemos. Al final, nuestra “realidad” siempre cambia queramos o no, circunstancias, edad o cualquiera nos la puede trastocar. Pero nuestros pensamientos y deseos entrañables son tan solo nuestros y nosotros somos los únicos que decidimos a quien le damos acceso y solo nosotros los podemos modificar.
Creo que tal día como hoy es buena idea trasladar al papel u otro formato una lista, mejor secreta. Con el objetivo sencillo de que cuando finalice el 2008 tengamos elementos para hacer un balance donde encontrar nuestras contradicciones y virtudes. Los objetivos que con satisfacción veremos cumplidos, los que se cumplirán por un camino que ahora mismo seguramente ni nos imaginamos y los que quedarán pendientes o para reorientar para el siguiente.
Trataré de estar aquí cuando el año acabe, refiriéndome a esta entrada. Espero también que entre estas líneas vuelva a estar en tu órbita, genial si es en tu ecosistema.
Feliz año.
1 comentario:
hola Rafael!!!
mil gracias por el banner!
es de suma ayuda la difusión para nosotros.
que tengas un gran año.
un abrazo desde argentina!
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